Banxico le da su Navidad a Calderón

De acuerdo con datos del Banco de México, la inflación en la primera quincena de diciembre se ubicó en un nivel de 0.45 por ciento, un crecimiento por encima del doble del mismo periodo del año pasado, cuando el aumento de los precios totalizó un .20 por ciento. Además, este aumento de precios es el más alto en siete años. Con razón Felipe Calderón, hace unos meses, en un tono entre desesperado y autoritario se dio el lujo de dar “recomendaciones” al banco central sobre el manejo de la política monetaria. ¡Si no le conviene que se den a conocer cifras tan desfavorables! Lo único que se evidencia con estas noticias dadas a conocer por Guillermo Ortiz y su equipo es que el manejo de la economía con el PAN en el poder ha sido todo menos adecuado. Está comprobado: los blanquiazules, que presumen de pericia técnica y de honestidad, salieron tanto o más maletas que los priístas (además de mucho más rateros, pero eso es otra historia). Los precios han subido, con Felipe Calderón en la presidencia, más que en los siete años previos. ¡Bravo, campeón! Sin duda este es uno más de los “logros” del “México ganador de Sub-17”, aquel que en campaña tanto ensalzara el panista que se propuso quedarse con la presidencia “haiga sido como haiga sido”, y que hoy no sabe qué hacer con una responsabilidad que a todas luces le queda grande. ¿Qué pensarán aquellos que en 2006, paralizados de miedo, dieron su voto al PAN “para que vivamos mejor”? ¿Se darán cuenta que el “peligro para México” resultó ser su candidato? Posiblemente. Lo que no es probable es que estén dispuestos a aceptarlo. Ya lo mencionó en algún post anterior Víctor Hernández: hay panistas (afortunadamente no todos) que son demasiado fanáticos o demasiado obstinados como para admitir que se equivocaron de principio a fin al darle su voto a un ambicioso vulgar que, en su afán de poder y riqueza, no ha tenido empacho en llevarse al país entero entre las patas, como ha sucedido en todos los otros órdenes de la vida pública: seguridad, empleo, pobreza, y más grave aún, confianza en el futuro.Por fortuna, cada vez son más los mexicanos conscientes que, hartos del engaño blanquiazul, desencantados del “México ganador”, engruesan las filas del movimiento democrático, dispuestos a luchar por rescatar lo que aun nos queda de país de las garras de los zopilotes que durante siete décadas tricolores, más ocho años azules, han rapiñado la riqueza de México. Y cada vez se van quedando más solos aquellos que aun insisten en que Calderón, desde un puesto que no es suyo, está haciendo “un buen trabajo”. Tenemos de nuestro lado la esperanza. Nunca los enemigos de México han sido más fuertes que su gente comprometida. Por eso, sabemos que vamos a ganar. A todos ustedes, lectores amigos, les deseo lo mejor en estas fechas. ¡Feliz Navidad!